Tour por las mejores croquetas de España
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Tour por las mejores croquetas de España

Tras los excesos de las fiestas, cuando estamos recuperándonos de las comilonas llega el 16 de enero el Día Internacional de la Croqueta. Este manjar es uno de los platos más típicos en las tapas españolas y que a todos gusta.


Es originario de Francia, aunque es más popular en Sicilia, en los Países Bajos y en España; donde puede comerse como acompañamiento, plato principal, entrante o tapa. Un clásico entre los clásicos donde la bechamel es la clave y los sabores pueden ser inagotables.



Por ello, te proponemos una lista de la A a la Z, para que tengas siempre a mano, de restaurantes en Madrid, Valencia, Marbella, Alicante o Toledo, donde poder degusta en España las mejores croquetas:



Amargo place to be

(Calle del Pez, 2. Madrid)


Croquetas de boletus y trufa (Amargo Place to be)

Ha estrenado el año con novedades y es que tanto su oferta como su decoración se vuelven ‘más verdes’. Además, ofrece un auténtico ‘maratón gastronómico’ que comienza con el desayuno y el novedoso brunch diario, pasando por su completo menú de mediodía, y la original y apetecible carta internacional maridada con la mejor coctelería de autor. Eso sí, entre sus propuestas más clásicas, las croquetas de chipirones en su tinta o de boletus y trufa ocupan un lugar importante y son ideales para compartir y abrir boca, ¿con qué variedad te quedas?.



(Calle José Abascal, 8. Madrid)


En Alma of Spain se esfuerzan día a día por ofrecer un servicio de lujo y la mejor cocina tradicional y de mercado. Un menú con denominador común, los ingredientes más exquisitos de la geografía Española. Por lo que las croquetas de jamón ibérico cremosas del chef Borja Segura son pura tradición y sabor… En su barra siempre son un imprescindible.



BIBO

(Av. Bulevar Príncipe Alfonso de Hohenlohe, s/n. Marbella)


Este conocido restaurante es la democratización de la alta cocina en estado puro. Esta propuesta de Dani García se puede disfrutar tanto en Marbella como en Madrid. Se puede disfrutar del recetario andaluz con muchos guiños cosmopolitas en platos como las croquetas cremosas y crujientes de jamón y polvo seco de tomate o las croquetas cremas de tinta elaboradas a base de guiso de chirriones en su tinta (11€).



Burger Shack

(Calle de Augusto Figueroa, 32. Madrid)


¿Una hamburguesa con una croqueta dentro? ¡Sí! Una de las señas de identidad del restaurante son los shacks. Se trata de una croqueta de queso empanado que se añade en el interior de su hamburguesa más famosa, la Burger Shack. Está disponible en cinco sabores: cheddar fundido con jalapeños, cheddar fundido con setas Portobello, cheddar fundido con chistorra y pimiento verde ahumado, queso crema fundido con bacon y cebolleta china y queso azul fundido con nueces.



Colósimo

(Calle Ortega y Gasset, 67. Madrid)


Este restaurante es el proyecto de dos jóvenes hermanos gaditanos Ricardo y José Manuel Romero, que conquistan con platos sencillos y conocidos, como su tortilla. Sus croquetas de puchero que se caracterizan por su bechamel, tienen un toque de morriña que las hace únicas.



(Calle Juan de Mena, 12. Madrid)


Situado en un enclave único de la capital, a escasos metros del Parque del Retiro y de la Iglesia de San Jerónimo El Real, Condumios Taberna cuenta con una carta repleta de elaboraciones tradicionales y deliciosas respetando la materia prima: carnes, pescados, guisos, chacinas y postres. Propuestas acompañada de las mejores Denominaciones de Origen de nuestro país.



(Calle San Bernardino, 9. Madrid)


En uno de los barrios con más encanto de Madrid se encuentra este restaurante con recetas de todo el mundo y que acoge a todo tipo de comensales. Y es que aquí conviven platos saludables con ‘pecados’ para darse un capricho. Una carta que incluso se refleja en el local: ecléctica, viajera, cálida y mestiza, en la que por supuesto, no faltan las croquetas de jamón.



Elektra

(Calle Santa Engracia, 108. Madrid)


La croqueta de este restaurante de cocina fusión saludable es una de las recetas que se han mantenido inalterables desde su apertura. Se trata de la croqueta de queso brie y gorgonzola. Para su elaboración, utilizan leche fresca de la granja madrileña El Cubillo, queso brie de Paysan Breton llegado desde la Bretaña francesa, y un gorgonzola italiano de intensidad suave. Para el rebozo, se utiliza panko, el pan rallado japonés.



Iván Cerdeño, Cigarral del Ángel

(Carretera de la Puebla de Montalbán, S/N. Toledo)


Reconocido con una estrella Michelin por su proyecto El Carmen de Montesión, el chef Iván Cerdeño, ganador del VII Concurso a la Mejor Croqueta de Jamón Joselito de Madrid Fusión, ha trasladado su cocina toledana al restaurante Iván Cerdeño - Cigarral del Ángel, dentro del histórico espacio de Toledo. Nuevos tiempos gastronómicos se entremezclan con las memorias de este emblemático cigarral a través del sabor, la estética y la creatividad en la cocina toledana de Cerdeño. En el restaurante homónimo del chef, sus croquetas se pueden degustar con el Menú de Mediodía (40€) y el Menú Monte y Ribera (60€). Asimismo, también se pueden pedir fuera de carta para añadirlo a cualquier otro menú.



La Barra de Sandó

(Plaza de Santo Domingo, 13. Madrid)


Hace unos meses que los fogones de esta céntrica barra, ubicada a escasos pasos de la Gran Vía, están dirigidos por el chef Isaac Fernández, conocido por ofrecer platos tradicionales a los que aporta su toque canalla y hacer hincapié en la gastronomía castiza. Se unen a la ruta de la croqueta para sorprender con las de calabaza y zanahoria con un toque de yogurt.





La Tajada

(Calle Ramón de Santillán, 15. Madrid)

En este bar del reconocido chef Iván Sáez no podían faltar las tradicionales croquetas caseras de jamón, que además son uno de los must que siempre le acompañan, un clásico que nunca falla y siempre enamora.



Matritum

(Calle Cava Alta, 17. Madrid)


Las croquetas de este restaurante siempre están en la comanda, porque no probarlas sería perderse uno de los clásicos de la carta, que ganan más aún con uno de sus maridajes… Sorprenden al ser croquetas de suquet de carabinero.



Oslo

(Calle Catalans, 8. Valencia)


Este restaurante vegetariano situado en el barrio del Carmen de Valencia, lleva desde su apertura en 2014 sirviendo dos recetas de croquetas que ya son marca de la casa. Se trata de las croquetas de gorgonzola con nueces, higos y lima; y croquetas de boletus y avellanas tostadas. Estas últimas se elaboran con cremoso de azafrán y pimentón de La Vera.



Pedegrú

(Av. de Valdemarín, 167. Aravaca. Madrid)


De la mano de la joven Sara Peral en los fogones, este restaurante lleva 9 meses dando mucho que hablar y ahora evoluciona y se llena de novedades, empezando por el nuevo equipo directivo. En cuanto a la propuesta gastronómica, mantienen algunos de sus platos más aclamados, como el Sándwich Pedegrú y las croquetas cremosas de jamón ibérico que merecen más de una visita.



Piantao

(Paseo de la Chopera, 69. Madrid)


La expresión 'poner toda la carne en el asador' nunca tuvo mejor representación en la capital, y es que este nuevo local trae a Madrid las brasas argentinas más exclusivas; es la gran apuesta del reconocido chef Javier Brichetto. Y casi que de la brasa salen también sus croquetas ya que su relleno es de asado de ternera, que nadie se olvida de pedirlas.



(Calle Apolonio Morales, 3)


El restaurante Quinqué ofrece una cocina tradicional fresca y desenfadada. Un proyecto emprendido por dos jóvenes y talentosos chefs con una trayectoria profesional muy respetada en el circuito gastronómico, Carlos Griffo y Miguel García elaboran una cocina de mercado basada en la tradición, en la que el cariño y la técnica van de la mano para sacar lo mejor del producto de temporada a un precio ajustado y así hacer accesible la buena gastronomía a todos los bolsillos, sin descuidar un ápice la calidad, como sus deliciosas croquetas de jamón.



Taberneros

(Calle Santiago, 9. Madrid)


Ubicada en pleno corazón del Madrid de los Austrias, esta taberna ilustrada con 21 años de vida tiene una estética castiza donde su imponente bodega vista tiene un gran protagonismo. La carta también es castiza a la par que viajera, y por supuesto, no faltan las croquetas caseras de pringá, que son de cocina de aprovechamiento, porque los jueves en Taberneros se come cocido y las hacen con la carne del cocido.



Terre

(Passeig Esplanada d’Espanya, 11. Alicante)

Disfrutar de la brisa del Mediterráneo mientras te deleitas con unas buenas croquetas puede ser una de los planes gastro más atractivos. En la carta de Terre, el restaurante de Grupo Murri especializado en cocina de producto que apuesta por la temporalidad y la sencillez en el tratamiento de las materias primas, proponen dos versiones: las de rabo de toro (11€), con guiso de rabo de toro sin bechamel, doble rebozado y acompañadas con mahonesa de alga wakame; y las tradicionales de jamón ibérico (10€), acompañadas por una mahonesa de jamón en la base.



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